MONTEVIDEO - Quienes entran en busca de la lejana Lucania son recibidos por otras imágenes, que sin embargo no son “otras”: los horizontes de Montevideo, Buenos Aires y Nueva York.
Los visitantes de la exposición de BasilicatË se sumergen, desde el primer paso, en una atmósfera conmovedora y llena de esperanza, dos sentimientos a menudo compartidos por los inmigrantes -y no solo de Basilicata- cada vez que miran el patrimonio de sus orígenes.
La muestra, inaugurada el miércoles 28 de agosto en el MuMi (Museo de las Migraciones), nace después de dos años de trabajo e investigación con las comunidades lucanas y es resultado de la colaboración con museos e instituciones que se ocupan no solo de la movilidad humana y las migraciones en Italia, pero también en Argentina, Uruguay y Estados Unidos.
La exposición, creada por la Federación de Lucanos del Piamonte, con el apoyo científico del Centro dei Lucani nel Mondo Nino Calice, y financiada por la región de Basilicata con los Fondos para el Desarrollo y la Cohesión, ya fue inaugurada en Nueva York y Buenos Aires.
En Montevideo permanecerá abierto hasta el 30 de septiembre.
BasílicatË es la primera exposición internacional sobre la cultura lucana contemporánea en el extranjero.
El título, elegido en colaboración con representantes de la comunidad, utiliza el nombre de la región en plural, para subrayar la multiplicación de la cultura producida por la migración. Además, reemplaza la “e” por una “Ë” (en mayúscula para darle más protagonismo), que reproduce un sonido presente en todos los dialectos regionales.
La exposición se divide en cuatro temas principales: lengua, manifestaciones religiosas en el espacio público, gastronomía y hogar. Cada tema se presenta en una sección donde es posible comparar, observando similitudes y diferencias, las interpretaciones que cada comunidad de la diáspora ha dado a la cultura de sus antepasados.
No se habla solo de las diferentes identidades lucanas, que tienen un origen común. “Es una exposición que habla del pueblo lucano y, en general, también de los italianos que han hecho grande a este país, Uruguay, así como Uruguay ha hecho grandes a los italianos, los ‘uruguayizó’”, afirmó Luis Bergatta, director del MuMi.
Se trata de “una investigación de dos años –explicó Mimì Coviello, coordinadora científica del Centro Lucani nel Mondo– para comprender este vínculo entre nosotros que estamos en Basilicata y ustedes que están aquí en Uruguay, pero también con nuestros primos en Nueva York y Buenos Aires”.
Para descubrir que tenemos algo en común, que todavía tiene sentido celebrar este vínculo. “¿Y cómo hacerlo en el siglo XXI? –pregunta Coviello–. Descubrimos que es posible mantenerlo vivo, a través de nuevos lenguajes, el arte, la cooperación y la cultura en general”.
En 2024, declarado por el gobierno italiano como el año del “Turismo de Raíces”, son importantes iniciativas como ésta, que dan sentido al concepto mismo de raíces.
“Ya no basta con pensar solo en el pasado y de dónde venimos –explicó Alberto Amadei, Primer Secretario y Jefe Adjunto de Misión de la Embajada de Italia en Montevideo–. Necesitamos una perspectiva de futuro en Italia y un interés en nuestro país. Nuestro objetivo es que Italia sea interesante por lo que es, por lo que será, por las oportunidades que ofrece, no sólo por lo que ha sido”.
El proyecto fue reconocido como de interés por el Ministerio de Cultura de Uruguay y se enmarca en la celebración de los 300 años de la ciudad de Montevideo y de la agenda 2024 de MuMi “Montevideo de quienes la viven y de quienes la sueñan”.