BUENOS AIRES – Participó en la primera vuelta al mundo junto a Fernando de Magallanes y Juan Sebastián Elcano, de quien era cronista oficial. La primera circunnavegación de la historia, como se aprende en la escuela primaria, duró de 1519 a 1522. Antonio Pigafetta nació en Vicenza alrededor de 1491 y fue uno de los 18 sobrevivientes (Magallanes murió en 1521) que lograron completar la expedición.

Su Relazione del primo viaggio intorno al mondo se transformó en el texto más importante sobre los descubrimientos geográficos de la época, con información de gran interés científico, geográfico y lingüístico.

Para valorizar su figura, en 2021 se constituyó, por iniciativa del gobierno italiano, el Comitato Pigafetta 500, que entre 2022 y 2025 llevó adelante diversas iniciativas, entre ellas congresos, la traducción crítica al español de su diario de viaje y una versión ilustrada para jóvenes (Pigafetta. Storia del primo viaggio intorno al mondo, de Giada Peterle, publicada por la editorial Becco Giallo).

Ahora una delegación vicentina llegó a Sudamérica, tras las huellas del ilustre conciudadano y precursor, para recorrer nuevamente su itinerario.

Después de hacer escala en Buenos Aires, el grupo se trasladó al sur, visitó la ciudad de Puerto San Julián (fundada por el propio Magallanes en 1520) y, tras cruzar el estrecho de Magallanes, llegó a Chile, a Punta Arenas (donde se conserva una réplica de uno de los galeones de la expedición). El viaje concluirá en Santiago, donde también se espera la llegada del intendente de Vicenza, el joven dirigente del Partido Democrático Giacomo Possamai, de 35 años.

En Buenos Aires, la delegación fue recibida por el Círculo Vicentino de la capital, afiliado a Vicentini nel mondo, con varios encuentros en lugares significativos de la identidad italiana, como el Círculo Italiano y la escuela Islands (fundada por una familia vicentina, los Pallaro).

“Acá organizamos una presentación para los alumnos, a quienes les regalamos un ejemplar del libro para chicos –dice Alfredo Musitani, presidente del Circolo Vicentino de Buenos Aires–. La jornada terminó en el Instituto Italiano de Cultura, junto a otra vicentina ilustre, Gigliola Zecchin, más conocida como Canela”. Una de las escritoras y periodistas culturales más reconocidas de la Argentina, que de niña vivió con su familia la experiencia de la migración, relatada en su libro La niña que no vio los besos (Edhasa), publicado en italiano por Sette Città con el título Attraversare il mare.

Foto grupal de la delegación con Canela en el centro y un retrato de Pigafetta de fondo.

Entre los integrantes de la delegación estaban, entre otros, Giorgio Xoccato y Michele Marchetto (presidente y secretario general, respectivamente, de la Cámara de Comercio de Vicenza), Giovanni Luigi Fontana y Silvia Bagnara Milan (presidente y secretaria de la Academia Olímpica), Stefano Soprana (presidente del Comité Pigafetta 500), Renato Riva y Luciana Sadda (Vicentini nel Mondo) y Valentina Niero (de Confesercenti).

“Este viaje –dice Fontana– representa la culminación de cuatro años de intenso trabajo de investigación y divulgación. Pigafetta no fue solo un cronista excepcional, sino también un verdadero humanista, que entendió el valor del diálogo entre culturas”. Su legado, por tanto, en este mundo globalizado, sigue siendo profundamente actual.

“La composición del grupo muestra que la misión no es solo cultural –afirma Musitani–. El objetivo también es estrechar acuerdos económicos y laborales, dado que el Véneto y la zona de Vicenza en particular siempre carecen de mano de obra”.

En especial, la Cámara de Comercio de Vicenza y Veneto Lavoro lanzaron el proyecto Vita (Vicenza incontra i talenti argentini), una iniciativa que mira hacia la Argentina como fuente de talentos y está dirigida por ahora solo a personas que ya poseen ciudadanía italiana, poniendo en valor las competencias adquiridas en el exterior para facilitar su inserción en el mercado laboral.