ROMA - Un bañista italiano encontró el cuello de un ánfora antigua mientras caminaba por las costas de Latina.

El objeto, que fue entregado a la Guardia Costera, dataría del siglo II a. C.

Luego de encontrar el artefacto, que se encontraba en la orilla, el hombre dio aviso al socorrista más cercano de la Cooperativa Servicio de Trabajo Azul, que gestiona el servicio de vigilancia y salvamento marítimo en las playas libres del municipio de Latina. El joven abandonó su puesto y recogió cuidadosamente el cuello del ánforas. Lo puso al resguardo y notificó del hallazgo a la Oficina Marítima de la Guardia Costera.

De acuerdo a información de Il Messaggero, el hallazgo se produjo en el lado izquierdo de la costa de la capital pontina, en la sexta pasarela, poco después de Capo Portiere, durante las primeras horas de un día muy caluroso y donde el mar era particularmente claro y transparente.

Según los primeros resultados de los estudios realizados, se trataría del cuello de un ánfora Dressel 2-4, que habría sido fabricada entre los siglos I y II a.C.  EL objeto -que se hallaba en buenas condiciones de conservación- se remontaría, por lo tanto, a la época romana. Se cree que podría haber llegado a la playa Pontina transportado por las corrientes marinas durante la noche.

En la antigüedad, este tipo de ánforas era utilizada para el transporte marítimo de vino, aceite y otras mercancías a lo largo de las rutas comerciales que bordeaban Italia.

El descubrimiento fue posible gracias a la claridad del mar de Latina en los últimos días. Resta que los próximos estudios confirmen la autenticidad de la pieza.