ROMA - El Cuerpo de Bomberos de Italia encontró este miércoles los cuerpos de dos niños de seis y siete años, hijos de migrantes rumanos, en un tanque de riego agrícola de una zona rural de Manfredonia, una ciudad de la región de Puglia, en el sur del Italia.
Los niños habían salido de la casa ayer por la tarde. Cuando sus padres fueron a buscarlos, encontraron sus pantuflas al borde del tanque de riego -que servía para recolectar agua de lluvia- y denunciaron la desaparición a las autoridades.
Por el momento se investiga un homicidio involuntario y la Justicia busca establecer posibles responsabilidades en tono a la muerte de los niños. La policía cree que posiblemente entraron al tanque -de unos tres metros de profundidad- a causa del calor. Los bomberos que trabajaron en el rescate sostuvieron que el operativo fue "dramático".
El arzobispo de la región, Franco Moscone, subrayó el hecho de que se tratara de una familia de migrantes y afirmó que “los hermanos y hermanas migrantes necesitan un plan de acogida serio, que les permita disfrutar de hogares seguros, servicios sociales adecuados y entornos comunes para hacer una vida digna".
“Son trabajadores de nuestras tierras y de empresas agrícolas. Merecen todas las garantías, como cualquier ciudadano", agregó.
"Los hijos de los migrantes muchas veces se quedan solos por el trabajo de sus padres o salen en busca de caridad y comida. No podemos recordarlos solo cuando pasan desgracias como estas.
Moscone lamentó la pérdida de la familia. “Ofrezco mi presencia para los padres afligidos, a los que abrazo fraternalmente, a todos los migrantes entre nosotros y a los voluntarios que intentan ayudar a estas personas".
