MONTEVIDEO – Floriana Cangiano, conocida artísticamente como FLO, cantautora y actriz teatral italiana, estuvo este fin de semana en Uruguay para presentar su espectáculo musical Canzoni di Sale. Antes del show, conversó en exclusiva con Il Globo.
La cantante recordó con cariño su primera visita a Montevideo.
“Esta es mi segunda vez en Uruguay, y la primera fue inolvidable –relató–. Pasaron muchos años. Recuerdo que en ese momento no estaba tan acostumbrada a viajar por el mundo como ahora, y era la primera vez que hacía un viaje tan largo, tan lejos de casa, con gente que hablaba otro idioma. Pero me acuerdo de que estaba muy emocionada”.
Su primer viaje a Uruguay fue posible gracias a un encuentro casual: “Tuve la suerte de conocer al director de la Sala Zitarrosa, un espacio cultural muy prestigioso en la capital. Nos conocimos en Cabo Verde”. Recuerda que Jorge Schellenberg le dijo: “Te voy a llevar a Montevideo y va a ser un gran éxito”.
Y así fue. Floriana habla del público uruguayo como “gente muy cariñosa, muy cálida con nosotres, y sobre todo muy interesada en mi propuesta musical. Me hacían muchas preguntas, querían saber sobre mi música, mis canciones. Y eso, para mí y para mi carrera, es algo muy importante”.
En Canzoni di Sale, FLO, acompañada por Federico Luongo en guitarra y Francesco Di Cristofaro en acordeón, invita al público a un viaje por el corazón del sur de Italia, a través de canciones originales y clásicos de la tradición napolitana, que cuentan historias auténticas de coraje, amor, ironía y destino.
El significado del concierto lo explica la propia Floriana: “El título Canzoni di Sale viene del protagonista: el mar. Pero también de los puertos, de las ciudades costeras y de la gente que vive en ellas”. La cantautora contó cómo estas ciudades “miran al horizonte con los brazos abiertos, recibiendo lo diferente, a las personas extranjeras y a culturas diversas”.
Estas ciudades están llenas de historias, porque la gente, al pasar por un puerto, cuenta su vida, deja una parte de sí. “En Canzoni di Sale –continuó Floriana– canto y cuento muchas historias que tienen como protagonista al mar, a la gente que vive cerca del mar y respira su aire”.
Entre todas esas historias, “la más importante es la de mi abuela Antonietta –declaró, sin dudar–. Mi abuela fue mi maestra de napolitano, una lengua distinta al italiano, con su propia literatura y sus propias canciones. Ella fue mi maestra y me enseñó muchísimo sobre la antiquísima tradición napolitana y sus rituales mágicos. Durante el concierto voy a hablar de eso, y también va a haber un momento dedicado a un rito napolitano, que siempre resulta muy divertido para el público”.
También le preguntamos a la cantautora qué significa para ella llevar la música italiana a otros lugares del mundo. Floriana responde con sencillez: “Creo que es muy importante llevar la música, y por lo tanto la cultura, de un país por el mundo –afirmó–. Sea italiana, francesa o egipcia, no importa. Lo más importante es que las personas estén en comunicación, que se conozcan, que sepan de música, de cultura, de cine, de literatura. Todo eso son herramientas de paz. El conocimiento en sí mismo es una herramienta de paz entre los pueblos, entre los seres humanos. Somos todos hermanos, así que conocernos nos protege del miedo a lo diferente. Y eso es muy importante en este momento histórico”.
Floriana también confiesa que ama la cultura latinoamericana y “todo lo que forma parte de ella: la poesía, la literatura, el cine. Y la música latinoamericana, por supuesto”.
Para ella, “nosotros también somos latinos, los del sur de Italia. Somos más latinos que nadie. Tenemos esa forma de vivir con fatalismo, con poesía, con lo sagrado y lo profano al mismo tiempo, y con una tradición antiquísima en el lenguaje y en la religión. Y eso es lo que yo veo en la cultura latinoamericana, lo que también encuentro en mí y en mi cultura del sur”.
Antes del concierto, Floriana anticipó: “La gente va a encontrar un poco de melancolía, un poco de reflexión, pero sobre todo vitalidad. Para mí lo más importante es transmitir al público alegría, ganas de vivir y de crear lazos con los demás, y también de encarar la vida con los brazos abiertos”.