MONTEVIDEO – Un homenaje a la creatividad, a las tradiciones y a la calidad italiana. Esta fue la segunda edición del Día Nacional del Made in Italy, una ocasión dedicada a promover nuestras mejores expresiones culturales e industriales. Aunque normalmente se conmemora el 15 de abril, este año se pasó al 23 por coincidir con Semana Santa.
Para esta importante celebración, el embajador Fabrizio Petri organizó una recepción en la residencia de la Embajada de Italia en Montevideo, donde estudios de arquitectura, desarrolladores y diseñadores de interiores uruguayos tuvieron la oportunidad de mostrar productos italianos disponibles en el país, en áreas como iluminación, mobiliario y decoración. También participó el chef Carlo Sammarco, que presentó platos tradicionales de la gastronomía italiana.
“Esta jornada tiene como objetivo celebrar los productos italianos, es decir, toda la calidad, el ingenio, la creatividad y el trabajo que nos representa. El Made in Italy es la excelencia que Italia exporta al mundo y que ayuda a fortalecer la identidad de nuestro país en el exterior”, explicó el embajador Petri.
“Me da un orgullo especial celebrar este evento en Montevideo, considerando los fuertes lazos entre Italia y Uruguay”, continuó Petri, y como ejemplo mencionó que el comercio bilateral entre ambos países el año pasado alcanzó los 800 millones de euros. Una cifra que destaca “la importancia de Uruguay como socio estratégico. La tradicional maestría italiana llega a todos los rincones del planeta, tanto a quienes ya conocen y aman Italia, como a los curiosos que aún la tienen que descubrir; a las personas mayores con sus recuerdos de la Madre Patria, y a las nuevas generaciones que construyen el país del futuro”, agregó el embajador.
Este día fue instituido por la Ley Marco para la protección del Made in Italy, el mismo día del nacimiento de Leonardo da Vinci, el 15 de abril de 1452. “Un genio universal que, más que nadie, representa la perfecta unión entre arte, maestría e innovación”, subrayó Petri.
El Día Nacional del Made in Italy busca reconocer la importancia de los productos italianos tanto en la consolidación de la identidad cultural del país como en la proyección económica de Italia a nivel global.
Al mismo tiempo, apunta a generar conciencia en la opinión pública sobre la importancia de proteger y valorar los productos que llevan la etiqueta Made in Italy, y a fomentar entre las nuevas generaciones el interés por los oficios artesanales y creativos que definen la excelencia de la manufactura italiana en el mundo.