El Centro Umbro trabaja para que las personas puedan conocer mejor esta región, tanto descendientes de italianos como personas interesadas en conocer Italia. Organizar un viaje para conocer la región fue una forma de unir todos los aspectos del trabajo realizado por la asociación.
El nombre “Binario Due” retoma el de una sección del programa radial L'ombelico del mondo, conducido por los hermanos Lucarini todos los domingos por la mañana en Radio Belgrano (AM 650). En ese espacio realizan un “viaje imaginario” en una localidad de Umbría, que varía en cada episodio.
Un viaje imaginario que se vuelve realidad.
De este modo, del 7 al 23 de mayo, veinte personas con tres acompañantes y representantes del Centro de Umbría participaron de este hermoso viaje para descubrir una región injustamente subestimada, que tiene mucho que ofrecer.
Acompañaron al grupo el presidente del Centro, Ariel Lucarini, el secretario, Marcelo Lucarini, y el socio y consejero, Riccardo Perelindo.
La pasión por las raíces es el ingrediente fundamental que hace especial este viaje. Los acompañantes son expertos en la historia de la inmigración italiana a Argentina y en las tradiciones de Umbría. Además, todos son profesores, con un enfoque muy didáctico de la cultura.
El itinerario ideado por los hermanos Lucarini tiene dos aspectos fundamentales: uno turístico, más genérico, y otro propio del turismo de raíces pensado para los descendientes de Umbría que quieren descubrir algo más sobre sus orígenes.
Durante el viaje, los asistentes visitan las principales ciudades de la región, con base en el centro histórico de Perugia para evitar demasiados viajes innecesarios, aprovechando al máximo el tiempo disponible. Pasan por Asís, Santa Maria degli Angeli, Orvieto (con parada obligatoria en la Catedral y los frescos renacentistas de Luca Signorelli) y pequeños pueblos como Spello, donde en junio se celebra la fiesta de la Infiorata. En ese momento la ciudad se llena de alfombras hechas con miles de flores. En algunas ediciones, el recorrido coincide con este evento y se pueden admirar los bellos arreglos florales.
En algunas ocasiones, los visitantes encuentran a las autoridades locales: este año el grupo fue recibido en el Municipio de Rasiglia (Perugia) por la concejala de cultura Irene Falcinelli y por Marco De Felici, concejal municipal de Foligno (Perugia).
Este año, el grupo también visitó la ciudad de Gubbio -famosa porque allì se ambientaba la serie Rai Don Matteo-, antes de la típica Festa dei Ceri, una competición entre los distritos de la ciudad.
Finalmente, los visitantes argentinos fueron invitados por la Asociación Eugubinos en el Mundo a una cena de bienvenida, en la que cerca de 500 personas de diferentes países (Francia, Alemania, Brasil, Australia…) celebraron sus raíces mientras disfrutaban de la cocina tradicional umbría.
En 2019, los viajeros asistieron al festival de música Solomeo (Perugia), en una sección dedicada a la música argentina en la que el Centro Umbro contribuyó llevando artistas. El Festival es organizado por Brunello y Federica Cucinelli, propietarios de la empresa Cucinelli, el gigante de la ropa made in Italy. Además, el grupo de viajeros también fue invitado a cenar por Cucinelli y Fabio Ciofini, director del festival, junto al coro de la Fundación Cucinelli, que también actuó. Una velada realmente especial.
En otras ediciones, el itinerario incluyó visitas a Spoleto, Città di Castello y Castelluccio di Norcia, donde cada año en primavera tiene lugar la floración espontánea de flores silvestres y flores que conviven en simbiosis con la lenteja (protegida por una marca IGP) en los campos cultivados.
Estupendo espectáculo que transforma la meseta en un cuadro impresionista.
“Para muchos es su primer viaje a Italia y no queremos que pierdan la oportunidad de visitar lugares como Siena, Florencia, Capri, Roma y el Vaticano. Por eso siempre incluimos algunos de esos destinos en el itinerario y otros fuera del circuito turístico clásico, en regiones como Sicilia, para conocer a todos los participantes -explica Marcelo-. Al cambiar el itinerario cada año, aseguramos que la propuesta se renueve, de modo que aquellos que lo deseen puedan repetir la experiencia con nosotros. Las personas que ya han hecho el viaje de Binario Due lo vuelven a hacer, también porque les gusta. Organizamos excursiones con guías locales, que sin embargo hablan español”.
Además de ser una experiencia cultural, es un viaje gastronómico para conocer los sabores de la cocina de Umbría, caracterizada por la presencia de sabrosas carnes curadas.
Suelen realizarse cenas restaurantes tradicionales del centro histórico de Perugia, donde se pueden degustar distintas las especialidades: penne rigate o strozzapreti alla norcina, pappardelle al sugo di cinghiale, porchetta de Umbría, torta al testo, strangozzi alla Spoletina y sopa de lentejas.
También se realiza una visita a Perugina -la fábrica de Baci, los famosos chocolates- y a la bodega Le Cimate di Montefalco di Perugia, donde los visitantes pueden profundizar acerca del conocimiento de la viticultura, antes del almuerzo con degustación vinos locales, como el Sagrantino di Montefalco.
“El viaje que ofrecemos es diferente a cualquier otro paquete comercial, es una inmersión en sabores, tradiciones y paisajes más y menos famosos de gran parte de Italia”, afirma orgulloso Marcelo.
La mayoría de los viajeros son descendientes de italianos que conocen el idioma.
Uno de los participantes de la edición de este año es un italiano que llegó a la Argentina cuando tenía 4 años. Esta era la primera vez que regresaba a Italia.
También para Elba, de origen umbro, era la primera vez en Italia. Quería conocer la casa de sus antepasados en Città di Castello en la provincia de Perugia.
Al tratarse de un viaje “a las raíces”, el itinerario incluye algunos días libres para que todos puedan encontrarse con familiares y visitar el lugar de donde sus familias son originarias.
En el caso de Elba, que nunca había tenido contacto con familiares y no podía comunicarse bien en italiano, se organizó un paseo en coche con una señora de confianza, con la que Elba entabló una amistad. Su objetivo era conocer la casa de sus antepasados, de la que solo tenía una foto antigua. Juntas consiguieron encontrarla y, al llegar, tocaron la puerta con gran emoción, sin saber con quién se encontrarían.
Elba fue recibida con los brazos abiertos por tíos y primos que le presentaron a otros familiares que se encontraban en el mismo barrio. Cenaron juntos y también mantuvieron se reencontraron los días siguientes. Desde ese entonces se mantienen en contacto y se comunican periódicamente.