BUENOS AIRES – Una cita dedicada íntegramente a Sicilia y a las oportunidades que ofrece el turismo de las raíces. El viernes 19 de septiembre, a las 18, en la sede del patronato Inca de Buenos Aires (Tacuarí 445), se presentarán dos videos sobre la isla italiana. Además de los anfitriones del Inca, organizan el evento la Unión Siciliana Emigrados y Familias y la Uima (Unión Italianos en el Mundo – Argentina).
Los dos videos, titulados En el corazón de Sicilia y En la tierra del mito, están dedicados a las tradiciones de la isla, que formó parte de la Magna Grecia y donde se encuentran algunos de los lugares mencionados en la Odisea.
Un ejemplo es el de Escila y Caribdis: dos monstruos marinos que habitaban en el estrecho de Mesina y hacían naufragar las naves, cuando en realidad eran las fuertes corrientes y las aguas siempre agitadas las que volvían difícil la navegación. De Escila (el monstruo del lado continental) incluso tomó su nombre una localidad costera de Calabria.
Además de los videos, habrá dos exposiciones en vivo: una a cargo del periodista Salvatore Bonura (experto en historia y tradiciones sicilianas, y estudioso de la diáspora siciliana), y otra de Salvatore Finocchiaro sobre “Asociacionismo y comunidad”.
Se espera la participación del diputado Fabio Porta (del Partido Democrático, PD), elegido por la circunscripción sudamericana.
La entrada es libre y gratuita, sin necesidad de inscripción previa.
El flyer del evento.
La conducción estará a cargo de Alfredo Llana, flamante presidente del Inca. “La identidad siciliana es muy fuerte en el asociacionismo en Argentina –comenta–, como lo son todas las pertenencias regionales en general. Me atrevería a decir que la identificación regional es el rasgo característico de las asociaciones más sólidas. Recuerdo que, hace 60 años, iba al Círculo Granitense de Quilmes”. Lleva el nombre de un pueblito de la provincia de Mesina, Graniti, de apenas 1.500 habitantes. “De ahí era mi mamá –continúa Alfredo–. Recuerdo las fiestas, los almuerzos, los asados ‘infernales’ que lograban organizar”.
Con el tiempo fueron las regiones las que siguieron mandando fondos a sus respectivas asociaciones en Argentina y manteniendo los contactos, a través de las “consultas”, con las comunidades en el mundo.
“Esto no significa que haya una oposición entre pertenencia regional e identidad nacional –subraya Alfredo–. Quienes mantienen vivas las asociaciones regionales con su voluntariado también se sienten profundamente italianos. Lo que sí es cierto es que las tradiciones gastronómicas, religiosas y folklóricas de referencia están ligadas al territorio”.
