BUENOS AIRES – La Corte Constitucional confirmó la plena legitimidad de la ciudadanía italiana por descendencia, pero para el diputado del Maie Franco Tirelli la verdadera disputa se juega ahora: la que enfrenta a la nueva ley Tajani.
“Para quienes no quieran iniciar el camino judicial, es necesario esperar el pronunciamiento de la Corte Constitucional sobre la nueva ley. Probablemente, también en función del fallo recién emitido sobre la normativa anterior, será declarada inconstitucional”, afirmó Tirelli, quien lleva meses en primera línea defendiendo en el Parlamento los derechos de los italo-descendientes.
La declaración llegó al día siguiente de la decisión con la que la Corte rechazó las objeciones planteadas por cuatro tribunales italianos contra el artículo 1 de la ley 91/1992, que garantiza la ciudadanía iure sanguinis sin límites generacionales.
El fallo subrayó la inadmisibilidad de cualquier intento de limitar la transmisión de la ciudadanía por descendencia, declaró infundadas las objeciones de inconstitucionalidad y reafirmó la igualdad entre italianos nacidos en Italia y en el exterior.
Para Tirelli, esto marca un punto de inflexión: “La Corte podrá ordenar al Parlamento reformular o anular la ley. Nosotros seguimos luchando para que el pronunciamiento llegue lo antes posible, con la declaración de inconstitucionalidad de la ley Tajani”, dijo, en referencia a la norma que entró en vigor en 2025 e impuso restricciones al reconocimiento de la ciudadanía para los italo-descendientes en el exterior.
La ley 74/2025, fuertemente impulsada por el ministro de Asuntos Exteriores Antonio Tajani, modificó los criterios de acceso y generó fuertes críticas de la comunidad italo-argentina y de numerosas asociaciones. Sin embargo, la Corte aún no se pronunció sobre ella: “Esta normativa no se aplica en los juicios analizados en este fallo, que se refieren a la ley de 1992”, señala el texto.
Tirelli, sin embargo, se muestra confiado: la decisión recién tomada constituye un precedente importante y podría influir en los próximos recursos. “Tenemos de nuestro lado un principio constitucional sólido. Ahora solo hay que resistir y seguir trabajando política y jurídicamente para hacer valer nuestros derechos”, concluyó.
Mientras se espera la nueva resolución, la comunidad italo-argentina mira con esperanza la posibilidad de un nuevo revés, esta vez contra la reforma Tajani, y que el vínculo con Italia vuelva a no tener plazos ni fronteras.