MONTEVIDEO - Las elecciones internas de este domingo marcaron el inicio de la carrera política que culminará con las elecciones presidenciales a finales de octubre y en una posible segunda vuelta en noviembre. Con una participación menor a la habitual (equivalente a apenas el 36%) los electores uruguayos eligieron a los candidatos oficiales de los tres principales partidos políticos, mientras que las formaciones más pequeñas ya definieron internamente sus fórmulas.
Álvaro Delgado resultó claro vencedor en el Partido Nacional (PN), al obtener el 75% de los votos, muy por encima de Laura Raffo, que con su 19% sale decepcionada de esta vuelta electoral, y de Jorge Gandini (6%). Sin embargo, la gran sorpresa llegó cuando Delgado eligió a Valeria Ripoll, ex frenteamplista y ex sindicalista, como su compañera de fórmula para las elecciones. Esta decisión, considerada estratégica, provocó el descontento entre algunos militantes tradicionales del PN, quienes esperaban una figura con mayor experiencia en el partido. Delgado tendrá ahora la difícil tarea de calmar las tensiones internas, intentando atraer votantes moderados de centroizquierda sin alienar a los sectores más conservadores del partido.
En el Frente Amplio, como se esperaba, Yamandú Orsi ganó la interna con un 60%, seguida por Carolina Cosse con un 37%, consolidando así la fórmula Orsi-Cosse de cara a octubre. Ahora, la definición de una política económica más o menos radical será crucial para mantener la cohesión y atraer votantes del centro.
El histórico Partido Colorado, ahora en fase de decadencia, eligió como candidato a Andrés Ojeda con el 40% de los votos, seguido de Robert Silva (23%), Gabriel Gurméndez (18,4%) y Tabaré Viera (17,7%). A diferencia de 2019, cuando Ernesto Talvi obtuvo la mayoría absoluta, Ojeda no logró unificar al partido, que sigue muy dividido entre sus corrientes internas. La tarea de Ojeda será articular un discurso que pueda diferenciar claramente a los colorados de sus aliados en el Partido Nacional, mientras buscan resurgir después de varios resultados decepcionantes en elecciones pasadas.
En términos de votación global, el Frente Amplio aumentó su base electoral, con 402.222 votos, recuperando parte del terreno perdido en las dos últimas elecciones internas, mientras que el Partido Nacional experimentó una importante disminución en su participación, al recibir 315.307 votos contra 457.376 de las elecciones internas anteriores. El Partido Colorado registró su votación más baja desde 1999, con 98.116 votos.
