YAS MARINA (ABU DHABI) - Lando Norris es oficialmente el nuevo campeón mundial de la Fórmula 1. El piloto británico de McLaren escribió su nombre en la historia tras finalizar tercero en el Gran Premio de Abu Dhabi, resultado suficiente para conquistar su primera corona en la categoría reina del automovilismo.

El desenlace fue electrizante hasta la última vuelta en el circuito de Yas Marina, donde Max Verstappen, ganador de la carrera, intentó presionar hasta el final para quedarse con el título, aunque finalmente quedó a sólo dos puntos de su rival.

Norris llegó al último compromiso del calendario con una ventaja mínima y la presión de dos contendientes de enorme jerarquía como Verstappen y Oscar Piastri. Pero el británico manejó la tensión como un veterano: sin cometer errores, administrando el ritmo y asegurando el podio que necesitaba para coronar una temporada sobresaliente. Con siete victorias, quince podios y siete pole positions, su 2025 quedará como una de las campañas más consistentes de un piloto que, desde sus inicios, era señalado como una de las grandes promesas del automovilismo mundial.

Del otro lado, Verstappen volvió a ganar con autoridad - fue su octavo triunfo del año - demostrando que su velocidad y agresividad siguen siendo insuperables en carrera. Sin embargo, su arranque de temporada irregular y varias jornadas sin puntos terminaron pesando en el balance final. El neerlandés construyó un sprint final impresionante, pero no alcanzó: Norris se mantuvo firme, no cedió a la presión y cerró su campeonato con una madurez notable.

Piastri, compañero de equipo y otro de los protagonistas del año, completó el 1-2 de McLaren en el campeonato de constructores con un sólido segundo puesto en Yas Marina. El australiano, que luchó hasta donde pudo, terminó siendo un factor clave en la batalla interna del equipo, que este año logró dar un salto competitivo enorme.

Más atrás, Charles Leclerc cumplió con una actuación destacada para Ferrari, terminando cuarto y mostrando un rendimiento que la Scuderia no había podido sostener de forma constante a lo largo del año. El monegasco cerró su temporada con sensaciones encontradas: buenos parciales, velocidad en clasificación y algunos podios, pero sin la regularidad necesaria para pelear por algo más. George Russell fue quinto con la Mercedes, mientras que Lewis Hamilton, protagonista de un año complejo, logró remontar hasta la octava posición luego de largar desde el 16° puesto.

Andrea Kimi Antonelli, otro de los jóvenes talentos señalados como futuro de la categoría, finalizó 15°, sin poder repetir avances recientes pero sumando kilómetros en un proceso de adaptación tan exigente como necesario.

La temporada 2025 quedará marcada por la irrupción definitiva de Norris como campeón mundial. Un piloto que combinó agresividad, inteligencia estratégica y constancia. Que ganó cuando debía ganar y sumó puntos cuando la victoria no era posible. Que mantuvo la calma ante la presión de Verstappen, uno de los rivales más feroces que puede tener un aspirante al título.

Abu Dhabi cerró un campeonato vibrante. Y abrió otro capítulo: el del Norris campeón, un nuevo rey en la Fórmula 1.