Luego de dos suspensiones, este martes comenzó el juicio por el fallecimiento de Diego Armando Maradona. Desde las 9:30hs, en el Tribunal en lo Criminal N°3 de San Isidro, siete de los 192 testigos declararon ante la Justicia.
Los abogados de los siete imputados, Agustina Cosachov, Leopoldo Luque, Carlos Ángel Díaz, Nancy Edith Forlini, Ricardo Almirón, Mariano Ariel Perroni y Pedro Pablo Di Spagna, solicitaron la absolución.
Maximiliano Savarino, Verónica Di Tommaso y Julieta Makintach son los jueces que definirán el caso, un debate que podría extenderse unos 4 meses, debido a la cantidad de pruebas que deben analizarse de todos los imputados: escuchas telefónicas, peritajes de celulares, estudios médicos, entre otras.
Los fiscales Patricio Ferrari, Cosme Iribarren y Laura Capra, encargados de investigar el fallecimiento de Diego, marcaron que hubo una “banda” que perjudicó a Diego y que los acusados “deliberadamente y con crueldad decidieron que muriera”. Además, señalaron que su muerte ocurrió en un contexto de abandono y falta de cuidados adecuados. Los fiscales sostuvieron que los médicos, enfermeros y otros especialistas a cargo de su atención eran conscientes del estado crítico en el que se encontraba y que, a pesar de ello, no tomaron las medidas necesarias para asistirlo.
En esa misma línea, quien ahondó sobre el tema fue el abogado de Dalma y Giannina, Fernando Burlando: “Hicieron todo mal, fue una acción de liberada. Fue un plan criminal con internación domiciliaria engañosa. Si lo hubieran internado en una clínica, Maradona no se hubiera muerto”, expresó.
La defensa de Leopoldo Luque, cabeza del cuerpo médico, alegó ante los argumentos de la defensa de Maradona: “Es lamentable deceso que se investiga fue producto de un evento cardíaco impredecible”, sostuvieron a la vez que aseguraron que la internación domiciliaria fue dispuesta con el acuerdo de la familia de Diego.
Vadim Mischanchuk, abogado de la psiquiatra imputada Agustina Cosachov, aseguró que “no se puede saber con exactitud la causa de la muerte (de Diego), por lo que no se puede imputar a nadie”.
Luego, el letrado defensor del psicólogo Carlos Díaz, Diego Olmedo, aseguró que el profesional no tiene responsabilidad de la muerte de Maradona. “Se le acusa de un homicidio simple por un comentario de WhatsApp”, aseguró. “No se le puede imputar el hecho de la muerte. No hay un solo elemento que indique que Díaz tuvo algo que ver en la muerte de Maradona”, agregó.
Los detalles de las acusaciones
“Homicidio simple con dolo eventual” es el delito por el que llegaron a juicio la psiquiatra Agustina Cosachov, al neurocirujano Leopoldo Luque, al psicólogo Carlos Ángel Díaz, la médica Nancy Edith Forlini, al enfermero Ricardo Almirón, al jefe de enfermeros Mariano Ariel Perroni y al médico Pedro Pablo Di Spagna. Una octava sospechosa, la enfermera Gisela Dahiana Madrid, será juzgada más adelante en un juicio por jurados.
Los siete imputados están citados a declarar este martes en el inicio del juicio, pero pueden negarse a hablar. La pena por lo que se los acusa va de 8 a 25 años de prisión.
Los últimos días de Maradona profundizaron la investigación
El 11 de noviembre del 2020, Maradona llegó al barrio privado San Andrés, en la localidad de Tigre, donde alquilaba una casa, para arrancar su recuperación después de haber sido operado de un hematoma subdural.
Por ese motivo montó una internación domiciliaria y varios profesionales empezaron a ocuparse de su cuidado. Sin embargo, 14 días después, falleció.
“Tras haber asumido voluntariamente ese rol y ocupando materialmente esas funciones; infringieron los deberes que cada uno tenía a su cargo -al tiempo que también conocían que sus consortes hacían lo propio- colocando o colaborando a colocar un cúmulo de factores y circunstancias notoriamente burdas, incrementando todos los antes nombrados el riesgo por fuera del margen permitido ocasionando el fatal desenlace del paciente que, de lo contrario, hubiese podido evitarse. Así, habiéndose representado el resultado fatal ante el grave cuadro de salud que evidenciaba la víctima, ejecutaron acciones contrarias al arte de la salud y omitieron realizar los actos específicos que cada uno debía desarrollar en torno a su función, agravando el cuadro de salud de Diego Armando Maradona, colocándolo en una situación de desamparo y abandonándolo a su suerte, ya que provocaron el deceso de Maradona el día 25 de noviembre de 2020 a las 12.30″, sostuvieron los fiscales.
Por todo ello, consideraron que los siete acusados no tuvieron en cuenta las enfermedades preexistentes del jugador y lo abandonaron a su suerte. “Ejecutaron acciones contrarias al arte de la salud y omitieron realizar los actos específicos que cada uno debía desarrollar en torno a su función”, indicaron.
Según los fiscales, esta acción hizo que se agrave el cuadro de salud del exjugador, “colocándolo en una situación de desamparo, abandonándolo a su suerte, ya que provocaron su deceso producto de una insuficiencia respiratoria y paro cardíaco”.
Además, Maradona sufría de enfermedades graves, como insuficiencia renal crónica, cirrosis dual, insuficiencia cardíaca, deterioro neurológico crónico, adicción al alcohol y psicofármacos, y probables enfermedades psiquiátricas, sumadas a un cuadro de abstinencia.
Aun así, para los fiscales, los siete imputados omitieron sus funciones e impidieron que recibiera la adecuada atención médica. La autopsia estableció que Maradona murió como consecuencia de un “edema agudo de pulmón secundario a una insuficiencia cardíaca crónica reagudizada” y descubrieron en su corazón una “miocardiopatía dilatada”.