CATANZARO – Con el 4,03% de los votos y más de 30.600 sufragios, Noi Moderati obtiene por primera vez dos bancas en el Consejo Regional de Calabria, logrando un resultado que el vicepresidente del partido, Pino Galati, definió como “histórico” y que al mismo tiempo representa la confirmación de una estrategia de arraigo territorial y de colaboración política de alcance nacional. Un camino que, como destacó el propio Galati, fue posible también gracias al aporte decisivo del Movimiento Asociativo Italianos en el Exterior (MAIE), fundado y presidido por Ricardo Merlo.

Entre los protagonistas de este proceso se encuentra el senador Mario Borghese, referente histórico del MAIE y voz clave para los italianos en el mundo, quien siguió de cerca la campaña electoral calabresa junto al vicepresidente Vincenzo Odoguardi y al coordinador del MAIE América, Antonio Iachini.

La sinergia entre Noi Moderati y el MAIE, explica el senador Borghese, surge de un pacto federativo firmado hace aproximadamente un año, basado en el respeto recíproco de la autonomía de ambos movimientos, pero guiado por un objetivo común: “Trabajar juntos por los italianos en el exterior y por políticas que los incluyan directamente”.

De esa alianza, inicialmente pensada para fortalecer la representación de las comunidades italianas en el mundo, nació también una colaboración en el plano de la política interna. “Nos dimos cuenta de que podíamos actuar juntos también dentro de Italia –subraya el senador– porque hoy viven en el país muchos italo-descendientes que regresaron del exterior: italo-latinoamericanos, italo-canadienses, italo-australianos. Son ciudadanos y son votantes. Y su voto también puede ayudar a construir una Italia más abierta a la dimensión global de sus comunidades”.

Durante la campaña electoral en Calabria, el MAIE tuvo un papel operativo y de enlace con las comunidades de retornados provenientes de distintas partes del mundo. “Organizamos una semana de encuentros con comunidades calabresas que volvieron de América Latina, Canadá, Australia y Norteamérica”, cuenta Borghese.

“Son personas profundamente unidas a la tierra de sus padres o abuelos, que quieren mantener vivo ese vínculo y, si es posible, contribuir también al desarrollo de Calabria. Nuestro trabajo fue hacerlas sentir parte de un proyecto político y territorial, apoyando la candidatura del presidente Roberto Occhiuto y la lista Noi Moderati”.

El senador destaca que la experiencia calabresa demostró la fuerza potencial de las comunidades regionales en el exterior, a menudo subestimadas por las instituciones. “Calabria en el mundo es una potencia: hay calabreses destacados en la cultura, la empresa, las profesiones. Es un recurso que puede y debe aprovecharse. Muchos de ellos son posibles inversores y quieren aportar al crecimiento económico y social de su región de origen”.

El objetivo, señala Borghese, es construir una cooperación estable entre las instituciones regionales y las comunidades calabresas en el mundo, haciendo que ese vínculo no sea solo simbólico, sino también concreto, a través de iniciativas económicas, culturales y sociales.

La alianza con Noi Moderati, explica el senador, fue también para el MAIE una oportunidad para ampliar su horizonte político, abriéndose al nivel regional de la representación. “Para nosotros fue una experiencia nueva. El MAIE siempre trabajó en los planos nacional e internacional, pero las regiones representan un nivel institucional más directo, más cercano a los ciudadanos y a las comunidades. Colaborar con las regiones nos permitirá construir una relación más concreta con los italianos en el exterior vinculados a cada territorio”.

En esta línea, el movimiento ya mira más allá de Calabria. “Nos presentaremos también en Lombardía, Véneto, Campania y otras regiones, para concientizar a las comunidades regionales en el exterior y crear un modelo replicable: una presencia que no se limite al Parlamento, sino que llegue también a las instituciones locales”.

Según Borghese, la colaboración con Noi Moderati es especialmente sólida gracias a la sensibilidad de la dirigencia del partido hacia el mundo de la emigración italiana. “El presidente Maurizio Lupi, el exministro Saverio Romano y el diputado Pino Galati conocen bien a las comunidades italianas en el exterior y las oportunidades que representan. Entendieron lo estratégico que es fortalecer el vínculo con los italianos en el mundo, no solo por una cuestión de identidad, sino también por el desarrollo del país”.

En el plano internacional, el MAIE ya mira a las próximas elecciones de los Cómites y del CGIE, con el objetivo de consolidar su presencia institucional. “Apuntamos a ganar la mayor cantidad posible de Comites y a tener una representación más amplia en el CGIE, no solo en América Latina, sino también en Australia, Canadá, Estados Unidos y Europa”, afirma Borghese.

Al mismo tiempo, el movimiento busca seguir fortaleciendo la colaboración con Noi Moderati, ampliando el trabajo conjunto en el territorio y promoviendo políticas específicas para los italianos en el mundo y sus lazos con Italia.

“Nuestro objetivo es unir esas dos dimensiones –la internacional y la nacional– en una estrategia coherente que valore la italianidad en todas sus expresiones”, concluye el senador.

Un objetivo que, a la luz de los resultados obtenidos en Calabria, parece haber encontrado ya una primera y concreta realización.